domingo, 11 de septiembre de 2011

Hasta donde ha cedido Danilo?

Hasta ahora no podemos decir hasta donde ha cedido Danilo Medina como líder de una estructura fuerte dentro del partido de la Liberación Dominicana, para que Leonel le dejara el campo libre y este pueda apoderarse de la tan codiciada candidatura por el partido oficial.

La llegada de la primera dama como candidata a la vice nos pondría en condiciones de creer que esa fue una de las condiciones que Leonel le exigiera.  Todos conocemos las ambiciones desmedidas de Leonel por controlar el espacio político dominicano. 


Sabemos que él mismo tanteó a la población, midió los pro y los contra de un eventual lanzamiento de su equipo político hacia otra aventura electoralista, y se dio cuenta que todos los sectores le cerraban la puerta, que la constitución todavía estaba en convalecencia y que no soportaba otra operación más que le permitiera al mandatario modificarla para tener el camino despejado y tirarse a las calles a una nueva aventura.

Todos estaban cansados de Leonel, incluyendo los que, dentro de su propio partido, hablaban públicamente que el hombre de la situación era Danilo, y que su tiempo – el de Danilo - había sonado, que hacía tiempo que había llegado, pero que esta vez no habrían marimañas - por parte de Leonel - que pudieran impedir que su mentor se lanzara una segunda vez por el trofeo, también muy codiciado, de la silla presidencial.

Leonel, como hemos dicho en trabajos anteriores, como hijo legítimo de una pequeña burguesía arrivista, no es ni tonto ni perezoso, y ha tomado el rumbo más negro de la política, ese rumbo que sólo conduce al enriquecimiento, al clientelismo, y a la promoción del transfuguismo.

Esto último como método refrescante de su estructura de dominación.  Con todo eso, Leonel ha creado un falso liderazgo, una impresión en la población de líder, de carismático, aunque en el fondo Leonel no es más que un buen vendedor, y todos conocemos los buenos vendedores, que muchas veces nos venden hasta lo que no necesitamos, y lo que muchas veces  no sirve.

En realidad, de nada ha servido para las grandes masas de dominicanos sus políticas en la que sólo los miembros de la cúpula de su partido han sido beneficiados.  Podemos decir que Leonel tiene una sonrisa Colgate, una cara de ángel, y una labia que convence, pero intenciones maquiavélicas de dominación, de despotismo, algunos elementos en su praxis política de trujillismo, y conocimientos, - o un equipo que conoce la manipulación de masas -  de marketing.

Digamos que Leonel se las sabe todas, todas;  pero que todas esas actitudes no son más que mañas de la pequeña burguesía, y que el pueblo es el único que paga las consecuencias de lo simpático del muchacho de Villa Juana.

Volviendo a lo de Danilo. Danilo, fuerte de una estructura dentro de los límites que bordean el partido oficialista, y con muchas oportunidades - según él - una vez siendo candidato por dicho partido de apoderarse de la cinta presidencial, tuvo que aceptar que Leonel es el discípulo número uno del profesor Bosch, o lo que es mejor, el niño mimado del profe, dándose él el puesto número dos, y abriendo un debate silencioso, como todos los debates que se dan dentro del PLD, a saber si en verdad ellos son los números uno y dos, y cuales le siguen después del dos.

Hubo un tiempo en que Felucho se consideraba el pollito de calidad del viejo roble, pero mucho ha llovido después,  además, vivimos en una época en la que es el poder del dinero que decide quien es quien, y el pobre Felucho tuvo que contentarse con lo que el destino político le ha reservado. Yo recuerdo los tiempos en que Felucho era un líder.

Danilo, al tiempo que le cedió el primer puesto a Leonel, en términos de discípulos del Profe, se aseguró, o se auto proclamó, antes de que aparezca uno más vivo que él, el segundo en la lista, algo que indiscutiblemente genera poder de liderazgo dentro, y podemos decir fuera, de la nave peledeísta. Entonces tenemos los dos discípulos más cercanos del profe. Un tercero, a quién le interesaría un tercer lugar? Después del dos, los otros son el montón.

De todas maneras todos los miembros de la cúpula política de PLD tratan de perfumarse con el ungüento que dejó en el aire uno de los hombres más puros que ha nacido en la minúscula geografía dominicana.

En política -decía el profesor Bosch- hay cosas que se ven y cosas que no se ven, y muchas veces las que no se ven son más importantes que las que se ven. Sólo Leonel y Danilo saben hasta donde llegaron las negociaciones para que el primero aceptara, de una buena vez por todas, que el segundo pueda intentar, sin muchos obstáculos de los Leonesitas, entrar al palacio como presidente de la república.

No hay comentarios:

Publicar un comentario