FILADELFIA, PA--El Departamento de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) anunció esta semana que la asistencia federal se ha puesto a disposición del Estado de Pennsylvania para complementar los esfuerzos de respuesta de la Commonwealth y local debido a las condiciones de emergencia como resultado del huracán Irene.
La acción del Presidente autoriza al Departamento de Seguridad Nacional, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA),
coordinar todos los esfuerzos de ayuda por desastre con el propósito de aliviar las penurias y el sufrimiento causados por la emergencia a la población local.
Además de proporcionar la asistencia apropiada para las medidas de emergencia autorizadas bajo el Título V de la Ley Stafford, para salvar vidas y proteger la propiedad y la salud pública y seguridad, y para disminuir o evitar la amenaza de una catástrofe, indicó FEMA.
La ayuda económica será brindada principalmente a los condados de Bucks, Chester, Delaware, Lehigh, Luzerne, Monroe, Montgomery, Northampton, Filadelfia, Pike, Sullivan, Wayne, y Wyoming.
Específicamente, FEMA reveló que está autorizada para identificar, movilizar y proveer a su discreción, equipo y recursos necesarios para aliviar el impacto de la emergencia.
Sin embargo, las medidas de protección de emergencia, se limitan a la asistencia federal directa y serán proporcionados en la financiación del 75 por ciento federal.
Según FEMA, Ed Smith ha sido nombrado como el Coordinador Federal para las operaciones de recuperación en el área afectada.
La misión de FEMA es apoyar a los ciudadanos y dar la primera respuesta para garantizar que como país trabajemos juntos para desarrollar, mantener y mejorar nuestra capacidad de preparación, protección, respuesta, recuperación y mitigación ante todos los peligros.
En Filadelfia y varios de los 67 condados que tiene el Estado de Pennsylvania fueron afectados por los torrenciales aguaceros y las ráfagas de viento que trajo a su paso el huracán Irene por la costa Este de Estados Unidos.
En esta parte, Pennsylvania, Nueva York, Delaware, Nueva Jersey, Virginia, Washington, Carolina del Norte, Connecticut, Rhode Island y Boston muchas viviendas sufrieron daños considerables por las inundaciones que también afecto severamente los campos agrícolas, produciendo pérdidas millonarias para los agricultores de la región.
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